Opinión

LAC8

En noviembre de 2015 Albayda participó en la Mesa del Observatorio de la Movilidad para proponer entre otras medidas la ampliación del recorrido de la LAC hasta la Estación de Autobuses. Una decisión lógica ya que estabamos refiriéndonos a la parada de autobús del municipio en la que suben más pasajeros. Todas las propuestas presentadas por nuestro colectivo fueron recogidas en un acta pública, pero casi ninguna llegaría a materializarse.

Meses después de aquellas reuniones, la prensa informó, algo que ya nos habían referido las autoridades locales en las distintas reunciones de trabajo que habíamos mantenido: la LAC no podía llegar a la terminal terrestre por cuestiones más económicas que técnicas. Para hacer viable la idea se necesitaban dos autobuses adicionales para el servicio LAC ya que, además de los existentes, siempre debe de existir uno en reserva por si se produce una avería. Se argumentó además, que debían instalarse las típicas marquesinas y máquinas que emplea este servicio de transporte público y que eso era muy costoso. Era costoso para un barrio como Albayda, no para el centro de la ciudad. Fue así como los vecinos de Carretera de Jaén y los miles de visitantes que a diario llegan a Granada por la única vía de comunicación existente quedaron sin conexión directa y sin transbordo con el centro de la ciudad. Sin embargo, para paliar un poco una situación claramente injustificable, el Ayuntamiento decidió modificar la línea SN1 y hacerla pasar por Gran Vía calmando con esta solución los ánimos en la zona.

Trasncurrido un tiempo se nos informó que además de las razones económicas, que evidentemente subyacen a esta rocambolesca decisión, existen otras cuestiones más relevantes que determinaban si cabe más la movilidad de la barriada. La principal de ellas era la existencia de un Convenio suscrito en 2006 entre el Ayuntamiento y el Metropolitano. Este convenio impide que el servicio público de autobuses urbanos discurra solapado al trazado del metropolitano. Al carecer de competencia se logra que el ya costoso transporte sobre railes sea viable. Esta circunstancia condicionará en el futuro la movilidad en zonas como Albayda, Camino de Ronda o Zaidín. Incluso ya antes de comenzar a operar el servicio de tranvía tiene repercusión pues las empresas de autobuses urbanos son reacias a realizar reajustes de sus líneas que puedan generar un conflicto con el futuro metro.

Luego a corto plazo es muy probable que una vez que entre en funcionamiento el metropolitano, los autobuses urbanos se vean sometidos una considerable reestructuración en Granada, pero muy en especialmente en Albayda ya que la referida clausula parece establecer que por donde van railes no podrán circular autobuses. Eso llevará a esta zona a depender casi exclusivamente del tranvía. Luego a la ya larga lista de perjuicios que ha ocasionado esta infraestructura que costó la friolera de 560 millones de euros —recordemos que muchos comercios tuvieron que cerrar por las pérdidas generadas por el retraso en las obras y que los parques del barrio se transformaron almacenes de materiales—, hay que incluir ahora el supuesto monopolio al que quedarán subyugados nuestros vecinos y vecinas, única forma de rentabilizar una inversión que aún está inacabada. Pero que aún sin concluir ya condiciona que las familias del barrio no puedan disfrutar de una conexión directa y sin transbordos con el PTS.   

 

José Ant. Fernandez

Vocal de A.VV. Albayda

tren

Autor: José Alberto Aragon Correa

Remitido a sección Opinión por: Enrique Cerdá Gila.  Vocal de Albayda.

Publicado por IDEAL de Granada.

Las dificultades geográficas del trazado, las consecuencias en necesidades de inversión y la falta de prioridad política han generado retrasos en la aprobación y ejecución de la llegada del AVE a Granada. Paralelamente la red de alta velocidad se encuentra en un elevado nivel de desarrollo en el resto del país. El tramo final de acceso a la ciudad está también generando dudas sobre su adecuada ejecución. Distintos colectivos vecinales reclaman que la vía ferroviaria sea subterránea en su acceso a la ciudad (soterrada). Sin embargo, las instituciones responsables del proyecto mantienen el proyecto en superficie alegando que el sobrecoste económico de esa alternativa la hacen inviable en el momento actual. El proyecto actual conlleva un paso del tren en zanja o en superficie junto con el reforzamiento de vías, postes, cables y muros de cierre. La argumentación de los costes podría no estar considerando suficientemente las implicaciones económicas indirectas de un trazado soterrado: generando beneficios económicos para la ciudad, sus vecinos y las propias administraciones públicas. Se señalan aquí siete razones económicas a favor de una alternativa soterrada.

NORMATIVA DE ALBAYDA WEB

 Preámbulo

Albayda es una asociación de carácter democrático comprometida con la igualdad y el pluralismo de todos sus miembros. En este sentido, la web
institucional es una herramienta fundamental para salvaguardar el derecho de sus asociados a recibir una información veraz y precisa relativa a los acuerdos y decisiones que su Junta Directiva y Asamblea de Socios, adoptan sobre todas aquellas cuestiones que afectan al barrio y su calidad de vida.

Con más de un millón y medio de visitas, la web institucional constituye un medio de difusión estratégico para implementar la imagen social que Albayda proyecta en el municipio. Esta circunstancia justifica la necesidad de establecer una normativa que organice la producción, creación y gestión de todos los contenidos que el colectivo y sus socios publican a través de su web.

En consecuencia, Albayda propone estudiar, aprobar y ratificar las siguientes disposiciones de uso de la página web para contribuir a mantener su buen funcionamiento y asegurar la publicación de todas las informaciones de interés para el vecindario:

Sr. Alcalde : Antes de entrar en materia, le deseo felices decisiones en el gobierno de la ciudad para este recién estrenado 2015.

A través de este canal que nuestra asociación pone a disposición de todos los vocales, deseo expresar el malestar general de los vecinos/as que habitan alrededor de un solar de la calle Miranda Dávalos, una zona de casas unifamiliares —aproximadamente unas 300— entre las que se pretende construir una “mole” de 6 alturas más  2,5 metros adicionales de peto en la cubierta para maquinarias y demás.

La situación resumida es la siguiente. En la casería de la Trinidad, frente a la Cámara de comercio, se demolió un hipermercado por sentencia judicial; al dueño, un conocido empresario de nuestra ciudad, se le permutó esa parcela por otra cercana en Miranda Dávalos, un suelo que era de uso Educativo y que había sido cedido tras la construcción de Cármenes de Albayda para que el Ayuntamiento construyera este tipo de equipamientos. De dicha situación se pasó posteriormente a uso terciario de oficinas y zona comercial, servicio muy demandado en la zona y cuya altura media no desentonaba excesivamente con el entorno de las viviendas existentes alrededor. Nuestra sorpresa fue mayúscula cuando a continuación de permutar esta parcela al constructor y otorgarle uso terciario, se vuelve pocos meses después a cambiar de nuevo el uso, ahora a Residencial Plurifamiliar en bloque abierto con 6 alturas (21 metros).

El plazo de alegaciones a esta innovación del PGOU coincidió de lleno con fechas navideñas puesto que finalizaba el 3 de Enero. Ello supuso, que muchos vecinos que se oponían al nuevo cambio no conocieron los cambios hasta prácticamente concluido el plazo. Algo que bien podría ser casual, pero que dada la trascendencia de los cambios, bien podría ser intencionado. Aún así, muchos vecinos informados de la situación, presentaron sus alegaciones formales ante la Administración Local a lo que se les advirtió: "Que no iba a servir para nada pues estaba todo hecho".

Poco a poco, Albayda va adaptándose a los nuevos tiempos. Hoy estrenamos de manera "experimental y en pruebas" la sección de opinión. Un lugar abierto para que todos los vocales y socios podéis expresar vuestras inquietudes sobre diferentes temas que nos afectan en la actualidad.

Estamos pues ante una sección liberal, abierta a la opinión personal y sustentada por el principio garantista de la libertad de expresión que toda sociedad democrática y constitucional debe salvaguardar.